
Un DJ profesional controla su volumen y sólo se concentra en la pista de baile.
Tus invitados que están bebiendo, comiendo o platicando pueden también disfrutar de tu fiesta desde su silla, porque el volumen no les molesta. O si se han cansado de bailar, pueden tomar un descanso para volver pronto a la pista de baile.
Un Grupo Musical normalmente tiene un montaje de sonido que cubre más que la pista de baile, invadiendo sobre todo las mesas contiguas a su escenario, y pocas veces tienen control del volumen. Lo cual no permite la interacción entre tus invitados que no están bailando, o que se han tomado un descanso.
El resultado final es que tus invitados no se la pasarán bien, razón por la cual tu fiesta resultará criticada.
Recuérdalo, en una fiesta nadie quiere estar sentado frente al Grupo Musical.
Un DJ profesional tiene un extenso catálogo, con música seleccionada y de buen gusto.

Un DJ puede atender sin complicación cualquier complacencia, siempre y cuando la canción en cuestión no atente contra la elegancia de tu fiesta y no le falte el respeto a tus invitados.
Recuerda, es una fiesta, no una borrachera en un bar.
Un Grupo Musical normalmente no puede atender complacencias, puesto que su repertorio está limitado a las canciones ensayadas y montadas recientemente, que son las mismas canciones que tocan en cada fiesta.
Además un DJ toca en promedio 150 canciones por evento, mientras que un Grupo Musical quizás tiene solo la mitad ensayadas, y sin duda solo las más populares.
Piénsalo un poco, ¿Quieres las mismas canciones que en la fiesta de tu amiga o amigo? ¿O que en tu fiesta toquen el Baile del Mono?
Un DJ profesional sólo toca canciones originales.

Un DJ toca la canción exactamente como tú la recuerdas, o incluso en una versión Remix que puede superar a la versión de la Radio. En cambio con un Grupo Musical podrías escuchar una muy mala imitación, incluso con desentonos y gallos.
Piénsalo un poco, ¿Quieres que tu fiesta sea criticada por una mala interpretación?
Un DJ profesional no hace pausas.

La música de un DJ puede ser continua e incluso no parar en toda tu fiesta, a no ser que tu o algún familiar desee dedicar algunas palabras, o que resulte importante dar algún anuncio de interés general.
En cambio un Grupo Musical normalmente descansa de 10 a 20 minutos cada hora.
Lo cual sin duda afecta el ánimo y el ritmo de tu fiesta, tus invitados se van a aburrir o perderán el interés por seguir bailando.
Un DJ profesional no es un intento de comediante, ni de locutor.

Un DJ jamás contará un mal chiste para darle tiempo a su compañero a que se ajuste a la nota o que arregle su instrumento.
Además no escucharás al DJ dedicar todas las canciones que toca, si acaso alguna especial y porque así fue pactado antes de tu fiesta.
Un DJ nunca dirá: ¡Vamos a tocar esta bonita melodía que más o menos dice así: 1, 2, 3…!
Piénsalo un poco, ¿Quieres en tu fiesta a un intento de Polo Polo o a un intento de locutor de La Más Picuda?
Un DJ profesional ocupa relativamente poco espacio.

Un DJ cuenta con equipo compacto y poderoso, que normalmente se coloca en estructuras y tripies, donde pocas veces estorba a tus invitados.
Además un DJ no llevará un gran escenario, el montaje de un DJ es realmente discreto y minimalista, pues tampoco está en un concierto.
En cambio un Grupo Musical lleva un gran escenario y la iluminación normalmente los ilumina a ellos, pocas veces a la pista de baile, haciéndolos protagonistas de tu fiesta. Y robándote espacio que podría ser para más mesas o sencillamente para un mejor flujo del tráfico de tus invitados.
En resumen.
Piénsalo un poco, quien debe brillar y ser el protagonista de la noche eres tú.
Chatea con nosotros ahora, o llámanos por teléfono antes de que la fecha de tu evento la ocupe otro de nuestros clientes.